Los cuidadores de personas mayores deben aprovechar el verano para descansar y cuidarse a sí mismos para no enfermar
Las personas cuidadoras de personas mayores deben aprovechar el verano para cuidarse a sí mismos, descansar, y atender sus propias necesidades en aras de recargar fuerzas para el invierno. Si no cuidan de sí mismos, tendrán más posibilidades de enfermar o, al menos, de ver diezmadas sus energías físicas y mentales.
Con la llegada de los meses de verano, la experta aragonesa en gerontología María Sonia López González, directora de la Residencia Reyes de Aragón, ha puesto sobre la mesa que el exceso de trabajo que supone cuidar a un familiar y afrontar de forma exitosa dicha tarea “no debe ser prolongando durante todo el año porque se necesita descansar”.
En este sentido, ha subrayado que los cuidadores “deben recordar que forman una parte esencial del cuidado, que ellos son el motor y por tanto, deben atender también sus propias necesidades y cuidar de sí mismos”.
“Muchos cuidadores se sienten culpables, pero no se dan cuenta de que cuidándose a sí mismos están cuidando mejor a su familiar”, ha afirmado la experta, que ha añadido que “con sus necesidades de descanso, ocio, apoyo emocional, etc, satisfechas podrán disponer de más energía y movilizar mucho más y mejor sus recursos físicos y psicológicos en el cuidado del familiar mayor”.
En este sentido, ha aseverado que si los cuidadores no cuidan de sí mismos, “tendrán más posibilidades de enfermar o, al menos, de ver diezmadas sus energías físicas y mentales”.
A tal efecto, López González recomienda a todos aquellos familiares dependientes que, al menos durante la época estival, descarguen fuerzas, y “lleven a sus personas mayores a centros en los que prime la calidad en la asistencia y no tengan que preocuparse de nada porque las necesidades de los resistentes son cumplidas con creces, como es el caso de la céntrica residencia zaragozana Reyes de Aragón”.
“Las estancias temporales no solo sirven para las fechas de vacaciones. A Reyes de Aragón vienen personas mayores convalecientes tras una intervención quirúrgica, etc., que necesitan de unos cuidados específicos que en casa son difíciles de conseguir”.
“Por otro lado nos encontramos con familias que necesitan un apoyo en circunstancias especiales. Encuentran en el centro un lugar apropiado en el que se desarrolla un cuidado integral por parte de nuestro equipo multidisciplinar hacia su familiar. En numerosas ocasiones suele ocurrir que estancias temporales se terminan convirtiendo en estancias permanentes, dado que tanto los residentes como los familiares encuentran en Reyes de Aragón un hogar para vivir con el máximo bienestar”, ha concluido