Las demencias constituyen un problema de salud cada vez mayor debido al progresivo envejecimiento de la población. Coincidiendo con la celebración del Día Internacional del Alzheimer el próximo domingo 21 de septiembre, la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), recuerda la importancia de acudir al médico de familia ante cualquier síntoma de alarma. Como explica la doctora Araceli Garrido, coordinadora del Grupo de Trabajo de Demencias de semFYC, “la cercanía y el conocimiento que tenemos de nuestros pacientes hacen que estemos en una situación privilegiada para hacer un diagnóstico temprano ante cualquier signo de sospecha, implicándonos activamente en todas las fases de la enfermedad. Tratamos de orientar al paciente y a la familia sobre cómo actuar en el día a día para convivir con la enfermedad lo mejor posible.
La dificultad para aprender o retener información nueva, la desorientación espacial y temporal, los problemas con el lenguaje, y los cambios en el estado de ánimo, en la personalidad y en el comportamiento son algunos de los signos de aviso de una posible demencia. Se estima que en nuestro país en torno al 5,6% de los mayores de 75 años padece alzhéimer. En este sentido, la doctora Garrido advierte que la mayoría de estos enfermos recibe el cuidado de su familia. “La atención sanitaria –añade- siempre debe coordinarse con la social y con la ayuda a los cuidadores. Además, esta enfermedad, así como el resto de las demencias, debe abordarse de una forma integral, adaptando los tratamientos y cuidados a cada fase”.
En el domicilio es muy importante el papel del cuidador por lo que como señala esta experta, “es imprescindible la información y formación a los familiares y cuidadores: cómo relacionarse y comunicarse con el paciente, cómo abordar los trastornos de conducta, mantener unas rutinas en las actividades diarias o evitar extravíos y accidentes”.
Prevención y diagnóstico temprano
Aunque la edad es el principal factor de riesgo, el Grupo de Trabajo de Demencias de semFYC recuerda la importancia de adoptar una serie de medidas preventivas y conocer cuáles pueden ser los síntomas. “Es muy importante el trabajo en equipo entre el médico de familia, el personal de enfermería, la familia y otros especialistas para llegar a un diagnóstico temprano”, concluye la doctora Garrido.
MEDIDAS PREVENTIVAS |
Mantenerse activo social e intelectualmente |
Hacer ejercicio físico |
Controlar los factores de riesgo cardiovasculares (hipertensión arterial, hiperlipemia, diabetes, obesidad) |
No consumir alcohol ni tabaco |
Seguir una dieta mediterránea con consumo de alimentos ricos en antioxidantes y omega 3 |
SÍNTOMAS |
Dificultad para aprender o retener información nueva |
Dificultad para realizar tareas complejas que antes realizaba |
Desorientación de tiempo y espacio |
Problemas con el lenguaje |
Cambios bruscos en el estado de ánimo, la personalidad o la conducta |